Como resulta bien conocido por todos, la tradición española de elaboración de excelentes quesos la convierte en dueña de indiscutibles joyas en este mercado.
Sin embargo, a pesar de que son muchos los buenos quesos ibéricos, hemos hecho una selección de los que pueden considerarse los mejores.
Cabrales, de Asturias: El mejor queso azul elaborado a partir de leche de vaca, cabra y oveja. Posee olor y sabor poderosos, una textura aceitosa y un regusto final sobre lo picante. Presenta entre dos y cinco kilos, de pasta semiblanda.
Grazalema, de Cádiz: Se consigue a partir de leche de ovejas merinas y de cabras oriundas de Grazalema. Su textura es sólida y su sabor agudo y también algo picante. Tiene forma cilíndrica, y su peso oscila entre los 1,5 y 2,5 kilos.
Mahón, de Menoría: Elaborado con leche cruda de vaca. Pueden hallarse tiernos o añejos. Tiende a deshacerse en escamas, su olor es fuerte y su gusto sobre lo salado y picante. Su forma es cuadrada y su peso oscila entre los 2 y los 4 kilos.
Torta del casar, de Cáceres: Se elabora a partir de leche de ovejas, coagulada con cuajo vegetal de cardo. Se distingue por su pasta cremosa, de aroma poderoso y gusto entre lo amargo y lo acidez. Es cilíndrico y pesa entre
San simón de costa, de Lugo: Se elabora a partir de la leche de vaca. Es un queso oscuro, ahumado con madera de abedul. Presenta un ligero olor a humo y un sabor tenue, entre lo ácido y lo picante.
Idiazábal, de Navarra-Guipúzcoa: Se obtienen de la leche de ovejas de la raza latxa. Tiene un sabor entre lo picante y lo ácido y una textura aceitosa. Es cilíndrico y pesa entre uno y tres kilos.
Zamorano, de Zamora: Es elaborado con leche cruda de ovejas churras. Suelen ser grasos y distinguirse por un picor intenso. Su peso oscila entre uno y cuatro kilos.
Las Garmillas, de Cantabria: Es un queso reconocido por su frescura y suavidad. Tiene forma de torta irregular y pesa alrededor de medio kilo. Es cremoso, y su gusto oscila entre lo dulce y una suave acidez.
Majorero, de Fuerteventura: Son quesos elaborados a partir de la leche de cabra majorera. Presentan sabor agradable y con un gusto algo ácido y dulce a la vez. Poseen forma cilíndrica y pesan entre dos y cinco kilos.
Manchego de La mancha: El más simbólico de todos. Elaborado con leche de oveja manchega. Posee un sabor entre lo picante, lo ácido y lo salado. Tiene forma cilíndrica y textura aceitosa.
Ahora te toca decirnos si has probado uno de estos, que te parece o si añadirías alguno a la lista. Comentanos!!