Cómo limpiar bocartes

Cómo limpiar bocartes: paso a paso

1. Comienza por separar la cabeza del cuerpo por la parte de las branquias. Lo más sencillo y efectivo es hacerlo con los mismos dedos, aunque puedes usar como alternativa un cúter o un cuchillo.

2. Una vez que terminaste con el paso 1, agarra con cuidado la cabeza para quitarla junto con las vísceras. Para ello, debes tirar la cabeza y las vísceras saldrán junto con ella. Si prefieres dejarle la cabeza, puedes hacerlo también. Como gustes. También puedes comenzar por quitarle primero la espina y luego la cabeza. Tú encontrarás la forma que te resulte mejor.

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3. Si has optado por quitar primero la cabeza, ahora tendrás que quitarle la espina central. Entonces, tira de la espina, dejando la cola junta, y deséchala. Luego, enjuaga los boquerones y séalos con un papel absorbente.

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4. Una vez limpios, ya puedes cocinarlos. Puedes empanar los bocartes y freírlos o rellenarlos y cocinarlos al horno, o simplemente marinarlos con jugo de limón, sal y pimienta.

Aunque no es una tarea complicada, se necesita de cierta práctica para realizarla con soltura. Quizás necesites ejercitar con diferentes maneras de limpiar bocartes. Todas son bastante similares entre sí, pero en las pequeñas diferencias que puedan encontrarse quizás des con la manera que te resulte más efectiva, más cómoda para ti. Veamos otra manera de limpiar bocartes o boquerones.

Al tratarse de un pescado pequeño y bastante frágil, la mejor herramienta que podemos usar para limpiarlo son nuestras manos, tal como ocurre con la limpieza de las anchoas de Santoña, por ejemplo, realizada por manos femeninas, delicadas y magistrales. Sigue esta guía paso a paso y tus boquerones quedarán perfectamente limpios, listos para cocinar.

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Cómo limpiar boquerones

1. Mete los boquerones en agua fría y sácalos uno a uno para limpiarlos.

2. Quítales la cabeza. Agarra el cuerpo del pescado de manera firme, pero sin aplastarlo; con la otra mano, agarra la cabeza y aprieta con los dedos en la zona de las agallas. Realiza un giro para separar la cabeza del cuerpo, aunque sin llegar a retirarla del todo. Entonces, arráncala por la parte de adelante, y retira la cabeza junto con las vísceras. Si las vísceras no salen con ese tirón, no te preocupes. Mete el dedo en el medio del vientre, debajo de la cabeza, y deslízalo hacia abajo mientras recoges las vísceras que van saliendo.

3. Para abrir el boquerón en dos, sigue deslizando el dedo entre la barriga para separar ambos lomos, hasta llegar a la cola. Ábrelo en forma de libro.

4. Quitamos la espina central. La coges desde arriba y tiras de ella con cuidado.

5. Por último, quitas la aleta dorsal, que está en la parte de la espalda, entre ambos lomos. Tiras de ella con cuidado.

6. Lavamos en agua bien fría o agua con hielo para quitar la sangre.

7. Sécalos con papel absorbente de cocina y luego cocínalos.

Consejos

- Si quieres congelar los bocartes, debes lavarlos antes de hacerlo. Para congelarlos, tienes que secarlos bien después de lavarlos para que no se forme hielo sobre ellos. Si son muchos, ponlos en un recipiente hermético, distribuidos por capas separadas por papel de aluminio.

- Para descongelar los bocartes, debes hacerlo como todo, gradualmente. Primero pasa el recipiente del congelador a la nevera la noche anterior. Al día siguiente ya podrás ponerlos a temperatura ambiente, si no han descongelado del todo.

Algo más sobre el bocarte…

Que el boquerón sea un pescado azul significa que es un pescado graso. También es uno de los más consumidos en España. Contiene excelente valores de ácidos grasos Omega3, que ayudan a reducir los niveles de colesterol malo y triglicéridos. Además es rico en proteínas, hierro, magnesio, yodo y en vitaminas del grupo A, B y D.

El bocarte y la anchoa son el mismo pescado; en realidad, la anchoa es el resultado del tratamiento en salmuera aplicado al bocarte. La época del año ideal para consumirlo es la primavera y también el verano, ya que en estas estaciones presenta más grasa y además es el momento ideal de captura porque, por las noches, se acerca a la costa a desovar. La talla mínima de pesca es de 9 centímetros.

En cuanto a sus valores nutricionales, el boquerón tiene 130 calorías por cada 100 gramos y 6 gramos de grasa por cada 100 gramos de producto.

Otro breve método para limpiar bocartes

1. Poner los pescados en agua fría y sacarlos uno a uno a medida que los vayamos limpiando. Agarra con una mano el bocarte y con la otra ejerce tracción desde la cabeza; tendrás que hacer un leve giro para separarla del cuerpo sin llegar a retirarla del todo, así también puedes retirar las vísceras, al menos las más grandes. Entonces, coge la cabeza, gírala y empieza a arrastrar.

2. La idea es tirar de la cabeza y seguir con la espina dorsal para llevarte en el proceso las vísceras. Lo mejor es arrancar la espina con la cabeza, pero si rompe en pleno proceso no hay problema: tira de la columna, el boquerón se irá abriendo y sus lomos quedarán unidos por el centro.

3. Cuando llegues al final, ya habrás quitado la espina por completo. Vuelve a lavar el pescado en agua helada, así retiras la sangre. Si los preparas en vinagre, quedarán más blancos. Cambia el agua varias veces.

4. Cuando tengas limpios todos los bocartes, ponlos a escurrir o colócalos sobre papel absorbente.

Algo importante

- El boquerón está relacionado con el Anisakis, así que es importante cocinarlo bien, con mucho calor, o congelarlo antes de consumir para así evitar una reacción con este parásito.

- No se recomienda el consumo a personas hipertensas y/o con problemas de ácido úrico, por su alto contenido en sodio y purinas.

- En cuanto a los usos culinarios, es habitual consumirlo frito, rebozado en harina de trigo o harina de garbanzo. También es tradicional el boquerón en vinagre.

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