¿Sabes cómo usar el azafrán?
"El oro rojo"
El azafrán es una especia resplandeciente que nos ofrece no solo un profundo matiz carmesí, sino también una explosión de sabor y aroma en cada plato.
El azafrán tiene el encanto de realzar cualquier plato con su peculiar sabor, armonizando maravillosamente con ingredientes tan diversos como el ajo, el limón, el tomate o el tomillo. Sin embargo, su uso no se limita solo a los arroces; es un aderezo excepcional para una amplia variedad de platos, desde sopas reconfortantes, carnes y pescados, hasta pastas y postres.
La especia más cara del mundo
Su precio elevado no es un capricho, sino la consecuencia directa de un laborioso proceso de cultivo y recolección. El azafrán necesita un clima de extremos: calor intenso y seco en verano, seguido de un frío riguroso en invierno. El proceso de plantación de los bulbos y cosecha de las flores de azafrán es una labor intensiva, generalmente realizada a mano y que demanda mucho tiempo. La cosecha de las delicadas flores debe realizarse al amanecer, tras lo cual los estigmas —tres por flor— deben separarse manualmente. Estos estigmas en forma de trompeta, de un rojo intenso, son la preciada especia que añadimos a nuestros platos.
Para tener una perspectiva del esfuerzo necesario, se necesita la recogida y limpieza manual de más de 150,000 flores para obtener un solo kilo de azafrán. Por eso es fundamental conocer cómo usar esta especia de forma eficiente, evitando cualquier desperdicio.
¿Dónde comprarlo?
El azafrán puede encontrarse en el mercado en diversas formas. Si optas por el azafrán molido, simplemente tienes que disolverlo en un poco del caldo de tu preparación, o bien, en unas cucharadas de agua tibia. En el caso de adquirir azafrán en hebras, se sugiere un tostado ligero para maximizar su sabor y aroma. Si decides no tostarlo, simplemente machaca ligeramente las hebras en un mortero antes de usarlas. Sin embargo, ten en cuenta que el tostado puede ayudar a liberar todo su potencial.
El uso del azafrán debe ser moderado debido a su intensidad, la recomendación general es de 5 hebras o 30 mg de azafrán molido por persona.
¿Cómo tostamos el azafrán?
Un método práctico es envolver las hebras en papel de aluminio y pasarlo unos segundos sobre el fuego, agitándolo constantemente para evitar quemarlas. También puedes optar por usar un microondas, colocando las hebras en un recipiente apto y calentándolas durante 15 segundos. Algunos también prefieren tostar el azafrán en una sartén, aunque es más desafiante evitar que se queme.
Una vez tostadas, las hebras de azafrán se vuelven quebradizas, por lo que el siguiente paso es triturarlas en un mortero. Dependiendo de la receta que estés preparando, disuelve el azafrán pulverizado en agua tibia o en un poco de caldo caliente antes de añadirlo a tu plato.
Recuerda, el azafrán es una especia delicada y poderosa. Al tostarlo y triturarlo, aprovechas al máximo sus propiedades culinarias.
Un último consejo para los amantes del azafrán: si sueles cocinar con esta especia, ten en cuenta que los utensilios de madera pueden teñirse de un tono anaranjado debido a su intenso color. Es el pequeño precio que pagamos por agregar esta joya culinaria a nuestras preparaciones.